Mitología
Mitología IV: Ulises
26 agosto 2022
Ulises u Odiseo, personaje al que dedicaremos algunos artículos, es muy citado por Homero tanto en la Ilíada como en la Odisea: primeros poemas escritos y conocidos en lengua griega. En el caso de la Ilíada aparece como un auténtico héroe a la misma altura que Héctor, Patroclo, Agamenón o Menelao que lucha en la guerra de Troya durante 10 años y que ocasionalmente hemos citado en algún artículo anterior; pero será en Odisea cuando Ulises cobra un papel de gran protagonista cuando transcurren diez años más, después de finalizada la guerra de Troya, para regresar a su casa en Ítaca con su esposa Penélope y su hijo Telémaco.
En este artículo nos centraremos en dar unas notas sobre el origen de Ulises, su nombre y algunos aspectos de su biografía. Enunciaremos algunos hechos de su destacada participación en la guerra de Troya, y dejaremos para otras ocasiones el periplo y las aventuras hasta que regresó a su hogar.
I – Genealogía y nombre de Ulises u Odiseo
La inmensa mayoría considera que Ulises en latín Ulyxes u Odiseo en griego, Οὐλίξης, es hijo de Laertes y Anticléa, y había nacido en la isla de Ítaca. Una isla del archipiélago del mar Jónico al oeste de la península del Peloponeso. Al parecer, el nacimiento de Ulises tuvo lugar mientras su madre caminaba por un sendero al tiempo que Zeus había provocado la lluvia, por lo que su nombre griego Odiseo, lleva ese significado, ο Ζευς κατα την οδον υσευ: Zeus envió la lluvia sobre el camino.
Sin embargo, hay otros escritores de las tragedias griegas que creen que Laertes no era el padre de Odiseo, sino que fue quien lo crió y educó y que su verdadero padre biológico fue Sísifo. Éste era un pastor que poseía muchas cabezas de ganado al igual que Autólico, abuelo materno de Ulises, pero Autólico era un experto en el hurto del ganado y tenía el don de poder transformar a cualquier animal que robaba cambiando el color de su pelo o modificando su cornamenta o pezuñas.
Sísifo contemplaba indignado como disminuían sus reses y aumentaban las de Autólico, pero no podía acusarle de rapiña, porque no tenía pruebas, por eso marcó en el interior de los cascos de sus animales un anagrama para identificar el ganado sustraído. Autólico desconociendo la estratagema urdida continuó robando las reses de su contrario, pero estas dejaron la huella a lo largo del camino que conducía a su casa. Al día siguiente Sísifo convocó a los vecinos para ir al establo de Autólico y reconocer a los animales que le pertenecían mirándoles los cascos, pero mientras los vecinos le convencían al ladrón para que le devolviera las reses ajenas, Sísifo aprovechó la ocasión y sedujo a Anticléa, hija de Autólico y esposa de Laertes. La consecuencia de esta seducción fue el nacimiento de Odiseo cuya sagacidad la heredaría de su padre biológico, de ahí que el nombre de Odiseo provenga del verbo ὀδύσσασθαι que significa estoy enojado tengo odio. Nombre que el mismo abuelo Autólico le puso al querer reflejar sobre su nieto la ira que los vecinos tenía contra él por la rapiña de las reses. Cualquiera de los dos orígenes familiares sirve para justificar el significado del nombre de nuestro héroe.
II – Infancia aprendizaje actuaciones y matrimonio de Ulises
Al igual que Aquiles y otros héroes, fue educado por el centauro Quirón que le introdujo en el conocimiento de las medicinas φάρμακα (phármaka). Con su abuelo materno asiste a la casa de los jabalíes, con tan mala suerte que un suido, herido, le ataca y lo hiere dejándole una gran cicatriz en el muslo, signo por el que será reconocido por la criada de la casa y por su esposa cuando llegue a su hogar después de tantos años errante.
Reclamará una indemnización por el robo de unas ovejas. En Mesenia cambia su lanza y espada por el arco de Eurito con el que vengará a los pretendientes establecidos en su casa tras su partida a la guerra. En Tafos consigue el veneno para untar en las flechas es decir el poema nos anticipa y va preparando para comprender posteriormente los acontecimientos que se desarrollarán en la Odisea. Muerto su padre Laertes, Ulises hereda al reino de Ítaca con toda su riquezas y personas. En edad de encontrar esposa, partió al palacio de Tindáreo al enterarse de que esté convocaba a los reyes y príncipes de Grecia para encontrar un esposo adecuado para la bella Helena, su hija.
Ulises, que destacará siempre por su astucia (metis -μῆτις), sabiduría (sofía -Σοφια), y prudencia (sofrosine, σωφροσύνη) para el desarrollo de estrategias o artimañas tropoi, viendo que la elección sobre uno de ellos, provocaría la ira del resto de los destacados dirigentes, les hizo prometer que respetarían la elección de la princesa. Tindáreo finalmente no quiso decidir personalmente el esposo para su hija, sino que permitió que fuera ella la que eligiera libremente, y así evitar discordias que condujeran a batallas (mahai -μάχη) y guerras (polemoi -Πόλεμος).
Garantizar un largo periodo de paz (eirene -εἰρήνη) en la Hélade y sobre todo en el reino de Tindáreo.
La decisión de Ulises tiene lugar cuando se da cuenta que él, que ha acudido a buscar Helena como esposa, no tiene posibilidades de convertirse en su esposo y sí en uno de los ochenta y nueve rechazados; pero también debe indicarse que Ulises no regresó a Ítaca solo, porque Tindáreo al ver la consideración que nuestro héroe había tenido con su decisión, tanto con él como con su reino, en agradecimiento a este honroso gesto, concertó el matrimonio de Ulises con la bella Penélope -aunque los textos indican claramente que la belleza de ésta no era equiparable a la de Helena. En cualquier caso, Ulises rompe la tradición aquella de quedarse en la casa de la esposa, que es lo que desea Tindáreo, y prefiere partir con su esposa a Ítaca.
Esto resulta realmente innovador en la Grecia antigua de aquel momento. Algún autor señala que Ulises se casó con Penélope tras vencer en una carrera pedestre, que había organizado Tindáreo, y que obtuvo a su mujer como consecuencia de aquella carrera. Así pues, Ulises tenía ya formada una familia con Penélope y el hijo de ambos Telémaco, todavía niño, cuando tiene lugar la guerra de Troya tras el rapto de Helena por París.
Ya vimos como Menelao, el esposo ofendido, acude ante el rey Agamenón, rey de Micenas, para formar una coalición de reyes y príncipes de los distintos reinos de la Hélade, Grecia, y así desarrollar en consecuencia el pacto que había sido suscrito por todos ellos a instancia de Ulises para preservar la paz.
III – Ulises en la guerra de Troya: previsiones y habilidades del héroe.
Se comprenderá fácilmente que con una familia establecida Ulises, sea primero en negarse en ir a la guerra. Rompiendo así el juramento prenupcial y fingirá estar loco para esquivarla. Este engaño no debe ser confundido con la falta de valentía (andreía -ἀνδρεία) de nuestro héroe, sino que es una respuesta a su responsabilidad familiar y a la inutilidad de la guerra; por ello cuando es descubierta la falsedad de su locura, debe partir al combate indicando a su esposa Penélope que en el supuesto de que él fallezca en la guerra busque una nueva pareja para asegurar la pervivencia de la casa y la educación de su hijo. La previsible relación deberá concluir el matrimonio, pero cuando esto ocurra su hijo Telémaco deberá ser mayor de edad y por lo tanto rey de Ítaca. De esta forma asegura la compañía Penélope y evita que alguien ajeno a su familia usurpe el reino que solamente corresponde a su hijo.
En la guerra veremos cómo Ulises consigue atraer a Aquiles para que éste se sume al combate a cambio de entregar joyas a las mujeres que están con el héroe que no quiere ver a nadie.
En algún autor sí indica que antes de comenzar la guerra, Ulises acompañó a Menelao a Troya para pedir al rey Príamo que obligase a Helena a volver con su marido.
Ulises también actuaría como negociador cuando obliga a Agamenón a devolver a Criseida a su padre el sacerdote Grisés. Concierta el combate entre París y Menelao, que no tendrá lugar. Hace entrar en razón a Aquiles tanto para que retorne a la guerra después de su enfado, como para aconsejarle la calma y descanso, cuando quiere vengar la muerte de su amigo Patroclo.
Seguiremos contemplándolo luchando y matando a los troyanos. Entrará en Troya disfrazado de mendigo y robará la imagen de Palas Atenea, diosa que le favorece constantemente y de la que Ulises es devoto. Negociará con Penélope la entrada de los griegos en la ciudad troyana, protegida por inexpugnables murallas y el cierre de sus puertas y diseñará la entrada de los saqueos en la ciudad dentro de un gran caballo de madera por el cual Troya fue destruida.