Murmullo sin ruedines
Fracaciones
12 agosto 2023
En vacaciones me gustaría no tener que conducir, ni estar obligado a madrugar para cumplir con el horario de desayuno del hotel. Me encantaría no tener que volar y con ello, evitar horas de espera y colas en aeropuertos. Desearía no tener que tomar decisiones continuamente ni moverme siempre en terreno desconocido con los riesgos añadidos que ello conlleva. En vacaciones quisiera no tener la obligación de pasarlo bien junto a millones de personas obligadas igualmente a visitar lugares comunes física y mentalmente, convertido en una tarjeta de crédito con patas. En vacaciones me gustaría liberarme de la presión del sistema para consumir cada vez más o correr el riesgo de no aprovechar los 15 días de oro que el gran hermano me asigna para ser feliz y vivir experiencias inolvidables. Se dice, se comenta, se rumorea, que se desconecta. Que remedio, si tienes que conectar con una nueva realidad en tiempo récord. Con sus reservas, colas, arena, rutas nuevas con mil peligros acechantes. Y mientras, bregar con la espada de Damocles de la frustración que, aunque con los años se aprende a pararla, cae con relativa facilidad. No creo que aprenda nunca a resistirme al encanto de unas vacaciones, pero lo que es, es lo que es.
Bajo la foto de portada podrán ver el vídeo musical de la canción que sirve de BSO a esta testualidaz, pulsen sobre el play allí presente para verlo...