Posmodernidad
La posmodernidad Fo
27 abril 2022
Buenos días. Yo no me llamo Liquen, me llamo John Ford y hago cine del oeste. Me llamo DGA y tengo las siglas de una grand ( con d) institución. Me llamo que si patatín que si patatán también. Y todo esto es para decirles que lo primero de todo es llamarse.
Una vez que tengamos el nombre, estoy pues dando una serie de pautas para los escritores y escritoras que se adentren en nuestra Garzeta, necesitamos un horario de escritura ( por la disciplina) unos sonidos a nuestro alrededor, un entorno apacible para nuestra mente y quizás algo de material combustible.
Escribir, pues, es un trabajo, una mala costumbre o una travesía, en la que somos un aderezado marinero.
Son las siete de la mañana. Hay alguien por estos lares, que dijo que hay que madrugar para guardar fiesta más rato. Buena frase. Está todo en silencio.
Se oye una pelea de gatos y el sonido de las cigüeñas. El sonido de las cigüeñas se dice crotoreo y tiene que ver con la salutación de la pareja. Esta semana he aprendido otro sonido, ya me perdonarán, es el ronqueo, que viene a ser el sonido que se emite al despedazar el atún. Hay que estar muy atentos a los sonidos. El más importante es el sonido del silencio, y eso te lo permite la propia escritura.
Yo escribo de oído.
El otro día aprendí yo una buena, Liquen. Murgunear…. Debe ser de la Ribera Alta…