El Canal Imperial de Aragón

Los orígenes del Canal Imperial de Aragón hay que retrotraerlos hasta la Edad Media, y a las reiteradas peticiones del concejo zaragozano para llevar aguas del Ebro hasta su término municipal. En el año 1510, el rey Fernando el Católico concedió autorización para realizar una acequia que fertilizara los campos de la capital. Sin embargo, no será hasta el reinado del Emperador Carlos V cuando se inicien las obras de la que se denominará la Acequia Imperial. Pero las dificultades tanto políticas, como económicas y, sobre todo, técnicas dieron al traste con tan importante y esperanzador empeño.

El Canal Imperial de Aragón surgió primordialmente como canal de riego, pero también se diseñó como canal de navegación.

Tendremos que esperar hasta el siglo XVIII, y con el reinado de Carlos III para que se retome la vieja idea y dar un impulso definitivo al futuro Canal Imperial de Aragón, que supuso, para la época, uno de los mayores retos constructivos de toda Europa. En principio fue la sociedad Badín y Compañía quien se hizo cargo de llevar adelante la empresa, pero una serie de, especialmente, fraudes económicos, hizo que finalmente fuera la corona quien asumiera la responsabilidad del proyecto. Un proyecto que contó con la ayuda inestimable del conde de Aranda, el conde de Floridablanca y, muy especialmente, de don Ramón de Pignatelli, protector del canal y principal artífice del éxito de lo planificado.

La extensión total de tierras regadas es de unas 26.800 hectáreas, la mayoría de ellas en Aragón, lo mismo que la veintena de municipios a los que abastece, tanto aragoneses como navarros.

El Canal Imperial de Aragón surgió primordialmente como canal de riego, pero también se diseñó como canal de navegación. Tiene su inicio en el Bocal (Fontella) en tierras navarras y finaliza en el denominado barranco de Zaragoza, entre el Burgo y Fuentes de Ebro. El canal tiene una longitud aproximada de unos 110 Km. y su mayor alarde técnico fue la construcción de una impresionante muralla y de un puente-acueducto de cuatro arcos, que cruza el río Jalón. Fue obra del ingeniero Julián Sánchez Bort. La extensión total de tierras regadas es de unas 26.800 hectáreas, la mayoría de ellas en Aragón, lo mismo que la veintena de municipios a los que abastece, tanto aragoneses como navarros.

En la actualidad, el Canal Imperial de Aragón sigue cumpliendo una inexcusable función para abastecer de agua de boca, para el regadío y la industria de las localidades por las que atraviesa.

En el año 2000 fue declarado Bien de Interés Cultural por el Departamento de Cultura y Turismo de la Diputación General de Aragón.

Pilar Pérez Viñuales nos manda texto y fotografías del canal, las fotografías de los reyes han sido tomadas de la wikipedia.