Posmodernidad
La chica de mi derecha
21 mayo 2024
No soy yo de darle mucha importancia de lo que acontece mi vida, y escribirlo. Cierto es que es bastante monótona. Como la de ustedes. Y entonces ¡¿ qué les voy a contar?¡
Pero es que la última sincronicidad se las trae. Y tengo que alentarles.
En estas que un amor me invitó al concierto de Silvia Pérez Cruz. Mi amigo, E.C., dice que es una triste. Puede ser, puede ser. Pero ahí que estaba yo, expectante .
En estas que saludo a la artista Gema R. y me dice ¿puedo hacerte una foto? y yo le contesto: «claro, claro» Y sonrío y foto para el chat.
Resulta que nuestros asientos quedan al lado de una pareja. Yo quedo a la izquierda de una chica, a la que ni tan siquiera miro, eso si, como soy un tipo medio educaú digo, holabuenastardes. Y me repliego. A saber, le cedo sin decirlo el posa brazos y las piernas rectas y saco mi libreta para poner algún apunte, alguna palabra, alguna idea. Mi idea era cubrir el concierto para la Garzeta, en plan crítico musical de la ribera.
Y veo que la chica está tomando apuntes. Como yo. Y ya como pensando: ¿ qué escribirá? y ¿ pa qué? Mira que si le llamaran la atención cosas parecidas a la mías. Todas esas dudas que le suceden al Pensador de Rodín y al pensador de Sancho Panza de la Ínsula Barataria que son el mismo (esta idea es de Ana G).
Bueno que empieza la artista a cantar y yo a gustarme y en estas que en un tema, AYUDA, se me escapa la palabra HODO, y la chica de mi derecha me dice te ha salido de dentro. Y más tarde me oye llorar y me consuela. Y me mira. Como diciendo: ya pasó, ya pasó.
Y nos vamos a nuestro pueblo mientras el Real Zaragoza está sufriendo. El partido y el concierto, tan al ladito.
Bueno y al llegar al poblado mi director me dice, la foto que has puesto, la chica de tu derecha es una artista. Una chica que escribe. Y hace arte. Y me resulta maravilloso que UNA DESCONOCIDA me haya consolado. Y saber que la chica de mi derecha es sensible, artista y que se interesa por una persona que no conoce y está a su lado, me hace pensar en cuantas personas hemos tenido a nuestro lado en esta vida, y no sabemos quién son y no nos hemos enterado que pensaban que sentían o qué necesitaban.
Os he metido un rollo, lo se. Pero este escrito o lo que sea es un homenaje a las sincronicidades. Pues eso.
Los seres humanos somos extraños.