Pintura
Jawlensky
3 mayo 2021
Imaginemos la España de finales del siglo XIX principios del XX, o en los mismos años la corte del Imperio Ruso zarista, y ahora pensemos en qué tipo de pintura podría hacer un aristócrata ruso, metido a militar, de la época.
Desde luego la primera imagen que nos viene a la cabeza no es el retrato de Alexander Sacharoff.
Este cuadro realizado en 1909 por Alexej Jawlensky, nuestro pintor del día, más allá de ser un determinado personaje destaca por dos cosas:
– Su indudable carisma
– Su apariencia andrógina
Ambas características se ven bien reflejadas en este retrato de Jawlensky, paisano del bailarín y coreógrafo Sacharoff.
Para los que piensan que este tipo de personajes solo han existido en nuestra actualidad, Sacharoff destacaba por su escandaloso vestuario que incluía pelucas de metal plateado y dorado, sombreros de flores y frutos de cera y estrafalarios y coloridos trajes. ¿Os suena de algún personaje de la actualidad?
Jawlensky está encuadrado entre los expresionistas -ya empezamos con los tecnicismos y clasificaciones.
Para que nos entendamos y presumamos de conocimientos pictóricos, los impresionistas, Monet, Degas, etc. Son esos chicos de finales del XIX que pusieron el mundo artístico patas arriba, que parecía que dejaban todo a medio pintar, que nunca usaban el color negro -¿A que eso no lo sabias? -y que pretendían captar el momento, la impresión del instante lo efímero. Poco después vienen otra gente que enfoca la pintura de una forma dramáticamente diferente, son nuestros amigos los expresionistas que buscan que la pintura sea el reflejo de la propia esencia de lo que se pinta. Si pinto a un señor que ese cuadro sea el reflejo de su interior, no su mera apariencia, de como realmente es, no de como muestra ser, recordemos que estamos en la época de Freud y del psicoanálisis -¡ Uff que profundo y aburrido! – y para ello emplean mayoritariamente colores fuertes, primarios.
Desde luego este retrato del señor Sacharoff que nos mira directamente a los ojos esbozando una enigmática sonrisa transmite todo el magnetismo que el artista quiso reflejar.
Vamos a ponernos un poco pijos y conozcamos un poco más la pintura de Jawlensky.
Su estilo está basado en la mayor simplificación posible, y en sus retratos, el protagonismo de los ojos es esencial.
Contemplemos ese retrato de “Mujer española” tema que le fascinó, no, nunca visitó España pero los espectáculos de folclore español estaban muy en boga en todos los cabarets europeos de la época. Volvamos al retrato, en él no busca reflejar la imagen de una mujer en particular, lo que busca es encontrar la esencia de la imagen de una mujer mediante la simplificación de rasgos y el uso desaforado del color, busca síntesis no lo accesorio y sin embargo claramente es una mujer, que no es nórdica, que transmite una gran sensualidad y hechiza.
Quizás en algún podcast futuro hablemos del porque de esa forma de pintar de Jawlensky.
Me ha gustado, no conocía a este pintor y espero que en tu próxima colaboración nos hables más de él.
Salud.